UNICAJA no es solo un banco. Existen dos instituciones homónimas: la primigenia llamada ahora FUNDACIÓN BANCARIA UNICAJA, y una consecuencia llamada UNICAJA BANCO S.A.
Para conocer la trayectoria que ha llevado a esta situación, hay que remontarse al año 1991. Braulio Medel ostentaba la presidencia de La CAJA DE AHORROS DE RONDA y por medio de una absorción, maquillada de fusión, integró en su estructura a las Cajas de Cádiz, Almería, Antequera y Málaga. Con posterioridad absorbió la Caja de Jaén. Nace UNICAJA, una CAJA DE CAJAS.
Manuel Ramírez Troyano
Firma de la escritura de la constitución de UNICAJA.
Málaga 18-3-1991
Fue una absorción ya que todas la Cajas excepto la de Ronda se encontraban en quiebra y su única opción de supervivencia era integrarse dentro de la CAJA DE AHORROS DE RONDA.
En 2011 esta CAJA de CAJAS decide crear UNICAJA BANCO S.A. Simplemente, crean una subestructura para que gestione el negocio. En el momento de la creación, CAJA RONDA y absorbidas, eran dueñas del cien por cien de UNICAJA BANCO S.A. Al igual que eran dueñas de múltiples instituciones, como por ejemplo el Club Baloncesto Málaga. UNICAJA BANCO gestionaba el dinero y UNICAJA baloncesto metía las canastas. Así de simple.
La ley 26/2013 de cajas de ahorros y fundaciones bancarias obliga a las Cajas que posean un diez por ciento de participación en una entidad de crédito a transformarse en FUNDACIÓN BANCARIA. En ese momento la CAJA DE CAJAS poseía el 90.77 por ciento de la propiedad de UNICAJA BANCO. Se transforma en FUNDACIÓN BANCARIA en 2014.
Los Estatutos de la Fundación Bancaria UNICAJA, la definen como una fundación privada sin ánimo de lucro con una finalidad esencial como es el fomento de obras sociales, benéficas, asistenciales, docentes y/o culturales.
Su transformación primero en una Caja de Cajas y ahora en Fundación Bancaria no ha modificado en nada los objetivos que tenia la Caja de Ahorros de Ronda.
Primero la Obra social, segundo nada y tercero la Obra social otra vez. 30 años para llegar al mismo sitio.
Las sucesivas absorciones efectuadas desde CAJA RONDA, hasta un total de once, se han basado única y exclusivamente en el potencial de la CAJA DE AHORROS DE RONDA. Lástima que CAJA RONDA ya estaba absorbida por el señor Medel, que ha sido el verdadero absorbente de todo esto. Una carrera profesional a costa de la riqueza de toda una Comarca.
En 2021 se decide la última absorción: LIBERBANK, otra CAJA DE CAJAS algo más pequeña.
Todas las absorciones excepto la primera se han venido haciendo con las acciones de UNICAJA BANCO, como moneda de cambio, es por lo que LA FUNDACIÓN BANCARIA UNICAJA a base de reducir su participación ha pasado de poseer el cien por cien de UNICAJA BANCO a un 30 por ciento del total. Este capital está valorado en la actualidad en unos ochocientos millones de euros.
La mencionada Obra Social en Ronda, desde el año 1991 se ha visto recortada. Colegios cerrados, guarderías desaparecidas, hogares de jubilados liquidados, Colonias infantiles perdidas, el Hotel Victoria y la residencia Parra Grossi vendidos, becas aniquiladas y el edificio de la antigua central de Caja Ronda convertida en Hotel.
El Ayuntamiento de Ronda desde el año 1991, no ha hecho otra cosa que asumir la desaparición de Caja Ronda y reírle las gracias al señor Medel. Nunca, ningún alcalde solicitó fiscalizar la obra social, ni presentó un proyecto serio a UNICAJA y sí algunos utilizaron UNICAJA como puerta giratoria.
El Ayuntamiento de Ronda ha sido parte del problema, se ha comportado como la vaca que mira al tren que pasa. En ese tren iba de pasajera toda la Obra Social que Caja Ronda había conseguido en ochenta años de historia.